Louis Vuitton viaja a la campiña inglesa para su colección Pre-Primavera 2026, un homenaje a la tradición británica reinterpretada bajo la mirada de la Maison. Con Jude Bellingham y Callum Turner como embajadores, la firma combina la sofisticación francesa con el espíritu utilitario inglés en una propuesta que equilibra modernidad, textura y herencia.
Bellingham encarna la elegancia relajada con un conjunto vaquero flocado y un aire rústico, mientras Turner aporta un tono clásico en un traje de lana Príncipe de Gales con el icónico estampado Monogram. El modelo Mathieu Simoneau completa la narrativa con un conjunto de seda que simula gotas de lluvia, símbolo de poesía y surrealismo sartorial.
Entre tweeds, espigas y franelas, la colección revisita los códigos de la sastrería británica. Tonos terrosos, calzado robusto y detalles funcionales evocan la esencia de la caza y el campo, transformando la elegancia tradicional en una visión contemporánea del lujo.