Cerrando el Mes de los Museos, vale la pena mirar más allá de los recintos tradicionales y redescubrir espacios poco explorados que resguardan historia, arte y ciencia en rincones insospechados de la CDMX. Desde San Ángel hasta Iztapalapa, hay museos que sorprenden tanto por su arquitectura como por sus propuestas curatoriales.
Ejemplos como el Museo de Geología, con fósiles monumentales, o el Ex Teresa Arte Actual, que habita una iglesia barroca convertida en laboratorio artístico, ofrecen recorridos únicos. Otros como la Utopía Tecoloxtitlan y el Museo del Fuego Nuevo revalorizan el conocimiento comunitario, territorial y prehispánico desde enfoques contemporáneos.
Visitar estos espacios poco conocidos no solo descentraliza el acceso a la cultura, también cambia la forma en que entendemos nuestra ciudad, al cerrar mayo, la invitación es clara: seguir explorando y reconectando con estos lugares que nos recuerdan que el arte, la historia y la ciencia también viven fuera de los reflectores.
