México reduce a la mitad gasto contra inundaciones
En los últimos dos sexenios, México ha recortado drásticamente los recursos para prevenir inundaciones. De acuerdo con el Primer Informe de Gobierno de Claudia Sheinbaum, la inversión en infraestructura hidráulica pasó de 50 mil millones de pesos durante el mandato de Felipe Calderón, a 45 mil millones con Enrique Peña Nieto, y finalmente a 25 mil millones en el sexenio de Andrés Manuel López Obrador.
Expertos sostienen que esta reducción explica la magnitud de los desastres recientes en Veracruz, Hidalgo y Puebla, donde las lluvias dejaron más de 60 muertos y decenas de desaparecidos. Para Julio Valdivieso, expresidente del Colegio de Ingenieros Ambientales, la política de austeridad “se impuso sin planeación técnica” y derivó en falta de mantenimiento, alerta y prevención, pese a que los fenómenos meteorológicos son cada vez más intensos.
El presupuesto actual confirma la tendencia: entre enero y junio de 2025 solo se destinaron 16.7 millones de pesos a obras de mitigación, frente a los 44 millones del mismo periodo en el sexenio pasado. Según Edmundo Gamas, del Instituto Mexicano de Desarrollo de Infraestructura, el país enfrenta “emergencias gestionadas con improvisación”, sin una visión transexenal de infraestructura ni políticas preventivas reales.
Empresarios de la Concamin advierten que la inversión pública en infraestructura equivale apenas al 2.2% del PIB, cuando debería alcanzar el 5%. Sin un plan nacional para obras hidráulicas, advierten, México seguirá repitiendo el mismo ciclo: austeridad, desastre y reconstrucción a destiempo.






