El presidente venezolano, Nicolás Maduro, envió un mensaje al pueblo de Estados Unidos en el que aseguró que su país “no quiere una guerra en el Caribe ni en Sudamérica”. Su declaración surge tras las amenazas del mandatario Donald Trump de autorizar operaciones militares contra Venezuela.
Durante la reunión del Consejo Nacional por la Soberanía y la Paz, Maduro pidió a empresarios y artistas difundir la “voluntad de paz” de su país y rechazó la estigmatización de los venezolanos como criminales. “Venezuela es un país de gente decente y trabajadora”, afirmó.
La cancillería venezolana denunció las declaraciones de Trump como una “grave violación del derecho internacional”. En paralelo, Maduro informó que más de 14 mil migrantes han sido repatriados desde Estados Unidos mediante el Plan Vuelta a la Patria.
