La presidenta Claudia Sheinbaum descartó la propuesta de Ricardo Salinas Pliego de abrir un diálogo sobre los adeudos fiscales de su grupo empresarial. Durante su conferencia, subrayó que “es un asunto de ley” y recordó que las mesas técnicas ya se han agotado en el proceso judicial.
El SAT reclama al magnate más de 48.000 millones de pesos, en juicios que hoy se ventilan en la Suprema Corte. Según la Procuraduría Fiscal, las irregularidades se relacionan con el uso indebido de pérdidas y beneficios fiscales entre 2008 y 2013, cuando aún estaba vigente la figura de consolidación fiscal.
Aunque Salinas Pliego acusa persecución política, Sheinbaum sostiene que se trata de un tema técnico heredado de gobiernos anteriores. El caso revela no solo la magnitud de los privilegios fiscales, sino también el desafío de un país donde la ley debe prevalecer sobre los intereses económicos más poderosos.