Hernán Bermúdez Requena, exsecretario de Seguridad Pública de Tabasco y señalado como líder de la célula criminal La Barredora, rechazó someterse a una extradición rápida a México. Durante la audiencia en Asunción, presidida por el juez penal especializado en crimen organizado, Osmar Legal, su defensa descartó acogerse al trámite voluntario que acorta tiempos judiciales.
El exfuncionario enfrenta acusaciones en México por asociación delictuosa, extorsión y secuestro exprés, además de presuntos vínculos con el Cártel Jalisco Nueva Generación. Fue detenido en Paraguay el viernes pasado y permanecerá bajo prisión preventiva en instalaciones de la Secretaría Nacional Antidrogas mientras se desarrolla el proceso ordinario de extradición.
La decisión de Bermúdez prolonga el litigio y refleja cómo los altos perfiles vinculados al crimen organizado recurren a marcos legales internacionales para dilatar su entrega. Más allá del procedimiento jurídico, la polémica subraya la fragilidad institucional de un país que ve a exfuncionarios de seguridad procesados por complicidad con la delincuencia que juraron combatir.
