Desde el 1 de octubre, quienes usen banca digital en México deberán establecer el Monto Transaccional del Usuario (MTU), que fija el tope máximo por transferencia. La medida de la CNBV busca reforzar la seguridad en operaciones electrónicas. Si no se configura antes del 30 de septiembre, a partir de enero de 2026 los bancos impondrán automáticamente un límite de 12,500 pesos por operación.
El MTU aplicará a transferencias vía SPEI, pagos de tarjetas de crédito y servicios. Para CoDi, Dimo y Transferencias Express, seguirá vigente un tope de 1,500 UDIS por transacción diaria. Los usuarios podrán ajustar su monto en cualquier momento desde las plataformas digitales de su banco.
Paralelamente, el SAT recuerda que las transferencias entre familiares o amigos que superen 600,000 pesos deben reportarse, de lo contrario podrían acarrear multas de hasta 35,000 pesos. Una regulación que, entre seguridad y fiscalización, redefine los márgenes de confianza en el sistema bancario.
